La alimentación desde la educación física

Desde las distintas administraciones públicas se están potenciando continuamente campañas para promocionar modelos de vida saludables. Estos modelos se basan en la práctica física regular, la correcta alimentación, el descanso y la exclusión de hábitos perjudiciales para la salud.

El área o la materia de educación física cumple con todos los requisitos para educar en estilos de vida activos y en conductas saludables.

Programar unidades didácticas sobre la alimentación resulta ser interesante y motivador para los alumnos ya que tratamos temas que están presentes en su vida cotidiana.

Teniendo en cuenta que la educación física es una mateia eminentemente práctica, se debe establecer un planteamiento práctico para el trabajo de contenidos que puedan resultar más teóricos, como puede ser la nutrición o los beneficios del ejercicio físico. Por otro lado, un enfoque práctico permitirá a los alumnos conseguir los objetivos propuestos desde una perspectiva lúdica y motivadora.

Una unidad didáctica sobre alimentación, puede ser aplicada en cualquier centro, ya que no precisa de instalaciones ni materiales específicos.

Esta unidad didáctica contribuye como aporte educativo sobre la educación en valores, sobre todo a la educación para la salud. Posee un aporte a las conexiones interdisciplinares, especialmente con Ciencias Naturales, y de manera fundamental a las competencias básicas como: conocimiento e interacción con el mundo físico; social y ciudadana; para aprender a aprender; y autonomía e iniciativa personal. Además de todo esto, se contribuye al Plan de Acción Tutorial, ya que permite una estrecha colaboración con el tutor del grupo en su desarrollo, el cual incluye el fomento de conductas saludables y el conocimiento de los efectos nocivos de diferentes sustancias y hábitos.

Como actividades tipo modificables según el nivel educativo de los alumnos tenemos algunos ejemplos:
- Elaboración por parte de los alumnos de un mural con la pirámide de los alimentos para la explicación posterior del concepto de dieta equilibrada y sana.

- Dialogar sobre la importancia de los alimentos. Ideas previas.

- Los alumnos traen un alimento a clase y se les explica a qué familia pertenece, beneficios de su consumo, etc.

- Ejercicios mediante tarjetas. Los alumnos deben hacer tarjetas de colores para los diferentes tipos de alimentos, por ejemplo naranja: cereales. Gana el equipo que primero forme una dieta equilibrada (3 tarjetas de hidratos de carbono, 2 de grasas, 1 de agua y 1 de proteínas). Se realizan circuitos o juegos físicos por grupos y cuando los terminen se les proporciona una tarjeta. Entre ellos se pueden cambiar las tarjetas, no valen las tarjetas repetidas.

- Realización por parte de los alumnos de dietas equilibradas teniendo en cuenta el número de ingestas diarias y la cantidad ingerida de cada uno de los tipos de alimentos.

- Reforzar los hábitos de higiene mediante carteles recordatorios.

- Buscar en diferentes alimentos las fechas de elaboración y caducidad y los símbolos de reciclado.

- Realización por parte de los alumnos de pautas para una buena alimentación para que lleven a casa.

- Visionado y comentario de diferentes anuncios publicitarios sobre algunos alimentos.

- Actividad sobre las calorías vacías. Los jugadores calorías vacías van a intentar impedir que los jugadores vitaminas, minerales e hidratos de carbono salgan de una zona determinada.

Para terminar, hay que recordar que estas actividades no conforman una sesión de clase, ni serán todas adecuadas para todos los niveles educativos, simplemente, son un ejemplo donde se pueden trabajar algunos contenidos sobre la alimentación desde el área de educación física.

Un artículo interesante sobre el tratamiento de la alimentación desde la educación física es el siguiente:
http://dialnet.unirioja.es/servlet/articulo?codigo=2280945